domingo, 1 de febrero de 2009

Primeros pasos hacia una teoría de lo visible

La mujer de la orilla se ha olvidado de escuchar el mar, pero sabe intuir el viento antes incluso de que las olas tiemblen. Ella sabe la dirección y el tiempo que puede durar una tormenta de arena. Instruida como el más hábil meteorólogo espera que pronto alguien aparezca y diga su nombre con las manos abiertas. Ella sabrá que él es el portador del pequeño milagro. Entonces todo será fácil.Por fin fácil...


Esta vieja postal nos sumerge en la música que se escucha en algunas de las casas flotantes de los cuentos orientales, en la calma y la añoranza del amor que siempre está por venir, para devolvernos al principio, al lugar donde pase lo que pase sabemos que estamos a salvo.



Ella parece decir:
A la espera de que su carta llegue, me reinvento para ti en esta fotografía. Pequeña, como un trozo de strudel en tu vieja chaqueta de pana, me imagino que soy capaz de alimentarte a pesar del frío y tus combates cotidianos para mandarnos dinero. Los niños me preguntan por la fábrica y sueñan con verte montado en uno de esos coches que se ven en las películas. No les digo nada, les dejo imaginar tal y como yo lo hago. Cada sueño nos acerca. Tan próximos...

Estas tres obras se encuentran a la venta ya enmarcadas en: La habitación de Kate C/Ollerías 12, Málaga.

2 comentarios:

  1. Qué preciosa te ha quedado la página! Y qué bien escribes y qué collages tan increibles! Y esto es sólo el principio! Enhorabuena y larga vida Mujer Polaroid! Besitos!

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  2. Pues a mi también me encanta de momento lo que veo! A seguir creando!

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